Letra de Prometeo - Ciro Y Los Persas
Letra de canci�n de Prometeo de Ciro Y Los Persas lyrics
Despu�s de tantas horas de tacklear el coraz�n
llega la destinaci�n, la misa imparche.
El se�or de los ruedos bajos fondos desde el cielo
respira hondo y escupe el mate.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Desde el pa�s de los infinitos comienzos ves
c�mo vas perdiendo fe en los que manden.
Un mundo resentido y frustrado por dem�s
siente que cada promesa siempre es fraude.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Pero si, vos te vas,
vos sab�s que en el silencio nunca hay nadie.
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Entre dos paredes, en tus ojos veo el sol, viejo sol, nuevo sol.
Entre dos paredes, en tus ojos veo el sol, viejo sol, nuevo sol.
El h�gado sangrante, vuelve la vida otra vez.
No s� si robar el juego fue brillante.
Guerra, sangre, f�tbol, vino, miserables y divinos.
Todos quieren recibir el sol radiante.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Pero si, vos te vas,
vos sab�s que en el silencio nunca hay nadie.
llega la destinaci�n, la misa imparche.
El se�or de los ruedos bajos fondos desde el cielo
respira hondo y escupe el mate.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Desde el pa�s de los infinitos comienzos ves
c�mo vas perdiendo fe en los que manden.
Un mundo resentido y frustrado por dem�s
siente que cada promesa siempre es fraude.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Pero si, vos te vas,
vos sab�s que en el silencio nunca hay nadie.
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Entre dos paredes, en tus ojos veo el sol, viejo sol, nuevo sol.
Entre dos paredes, en tus ojos veo el sol, viejo sol, nuevo sol.
El h�gado sangrante, vuelve la vida otra vez.
No s� si robar el juego fue brillante.
Guerra, sangre, f�tbol, vino, miserables y divinos.
Todos quieren recibir el sol radiante.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Pero si, pregunt�s,
vos sab�s que donde hay culpa nunca hay nadie.
Pero si, vos te vas,
vos sab�s que en el silencio nunca hay nadie.
