Letra de Latidos Contados - Iratxo
Letra de canci�n de Latidos Contados de Iratxo lyrics
Perd� los latidos contados y sigo queriendo tomar veneno.
Eterno mientras dure la partida, de ese trozo de sol y trozo de luna.
Aleteo mientras dejo caer al suelo, depongo las alas ya no las quiero.
Se me oxidan los clavos del madero, se me van haciendo de terciopelo.
Perd� los retales de la ilusi�n, que andaban cosidos a sus manos.
Zurciendo de vuelta las v�rtebras quebradas y los abrazos al estern�n.
Como me gusta enroscarme al pescuezo tus manos ardiendo y gritando te quiero.
Como me gusta perder la partida si tiras como dados los ojos con que me miras.
Los ojos con que me miras.
Como hago el payaso y disfruto de la vida, como hago que me caigo que te caigo encima.
https://www.coveralia.com/letras/latidos-contados-iratxo.php
Como hago un castillo con miles de ventanas, pa cuando apriete la ma�ana echarnos a volar.
Echarnos a volar.
El oto�o se ha puesto de largo, como una r�mora anclada a la sien.
Me hago una cama de esparto pa cuando no est�s pueda prender.
Encontr� en su guerra mi paz y despert� so�ando con un balazo.
Que atraves� de parte a parte, el coraz�n que ya no late, que se me hizo de carne.
Destrone princesas mate bufones, y volv� al olivo que me pario, bautice el ate�smo de los dioses.
Que no sab�an de amor ni de qu� se yo.
Eterno mientras dure la partida, de ese trozo de sol y trozo de luna.
Aleteo mientras dejo caer al suelo, depongo las alas ya no las quiero.
Se me oxidan los clavos del madero, se me van haciendo de terciopelo.
Perd� los retales de la ilusi�n, que andaban cosidos a sus manos.
Zurciendo de vuelta las v�rtebras quebradas y los abrazos al estern�n.
Como me gusta enroscarme al pescuezo tus manos ardiendo y gritando te quiero.
Como me gusta perder la partida si tiras como dados los ojos con que me miras.
Los ojos con que me miras.
Como hago el payaso y disfruto de la vida, como hago que me caigo que te caigo encima.
https://www.coveralia.com/letras/latidos-contados-iratxo.php
Como hago un castillo con miles de ventanas, pa cuando apriete la ma�ana echarnos a volar.
Echarnos a volar.
El oto�o se ha puesto de largo, como una r�mora anclada a la sien.
Me hago una cama de esparto pa cuando no est�s pueda prender.
Encontr� en su guerra mi paz y despert� so�ando con un balazo.
Que atraves� de parte a parte, el coraz�n que ya no late, que se me hizo de carne.
Destrone princesas mate bufones, y volv� al olivo que me pario, bautice el ate�smo de los dioses.
Que no sab�an de amor ni de qu� se yo.