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Caifanes fue un grupo mexicano de rock originalmente conformado por Sa�l Hern�ndez (voz y guitarra), Salvador "Sabo" Romo (bajo) y Diego Herrera (teclados y saxof�n). Alfonso Andr� (bater�a y percusiones) se unir�a a la banda a partir de su tercera presentaci�n en vivo. Su primera presentaci�n fue el 11 de abril de 1987 en Rockotitl�n. La expectaci�n creada en el underground rockero mexicano fue tanta que mucha gente se qued� fuera del recinto. Si bien Caifanes era un grupo nuevo, la anterior banda de Sa�l, Alfonso y Alejandro Marcovich, Las Ins�litas Im�genes de Aurora, ten�a una amplia base de fan�ticos.
Su primer disco, Caifanes (a veces nombrado tambi�n M�tenme porque me muero, Volumen 1 o Disco negro) sali� a la venta en agosto de 1988 y el sencillo M�tenme porque me muero fue su primer �xito, seguido por Viento y La negra Tomasa, una versi�n de una cumbia escrita por el m�sico cubano Guillermo Rodr�guez Fiffe. El disco mostraba claras influencias del grupo brit�nico The Cure y del resto del movimiento dark. Gustavo Cerati particip� como m�sico invitado en la grabaci�n del �lbum tocando la guitarra en La bestia humana. Este �lbum fue precedido por un EP con tres canciones producido con la intenci�n de probar la aceptaci�n del grupo entre la posible audiencia; el resultado fue la venta de m�s de trescientas mil copias y, por lo tanto, la grabaci�n del primer LP.
Su segundo disco fue Volumen II, pero es mejor conocido como El diablito. Esto se debe a la inclusi�n de la imagen de un diablo, que recuerda una tarjeta de loter�a, acompa�ado por una leyenda que dice justamente "El diablito." El guitarrista Alejandro Marcovich se integra al grupo; su presencia result� notoria desde un principio y su estilo fue fundamental en lo que comenzar�a a ser el sonido de Caifanes.
En El diablito aparece una de las canciones m�s populares del grupo, La c�lula que explota. Esta canci�n, mezcla de balada rockera con m�sica de mariachi, apunta muy claramente la direcci�n que Caifanes habr�a de tomar a partir de ese punto: una mezcla de rock con elementos de la ampl�sima gama de estilos que comprende la m�sica popular mexicana.
En 1992 se edita El silencio, producido por Adrian Belew y que incluye gran parte del repertorio cl�sico de Caifanes, como No dejes que ..., Mi�rcoles de Ceniza, Nubes y Nos vamos juntos. Cuando este disco sali� a la venta el grupo ya era un �xito en M�xico, Centroam�rica, algunos pa�ses de Sudam�rica y entre la comunidad hispana de Estados Unidos. En agosto de 1992 llenaron por completo el Hollywood Palladium de Los �ngeles. En 1993 hicieron lo mismo en el Palacio de los Deportes de la ciudad de M�xico, haza�a que ning�n otro grupo de rock mexicano hab�a logrado hasta el momento; con dicho concierto Sabo Romo se despidi� de la agrupaci�n. Diego Herrera lo seguir�a poco tiempo despu�s, al concluir esa gira.
Al llegar 1994, Caifanes queda reducido a un tr�o conformado por Sa�l, Alfonso y Alejandro acompa�ados en el bajo por Federico Fong y en los teclados por Yann Zaragoza. Juntos dan forma al �ltimo �lbum de los Caifanes, El nervio del volc�n. Se eligen como sencillos las canciones Afuera, Aqu� no es as� y Ayer me dijo un ave. Su presencia en los medios de comunicaci�n crece y es seguida muy de cerca por los noticiarios de MTV Latino para quien realizaron un unplugged (que en realidad fue un concierto el�ctrico) y donde se documentaron tanto el creciente �xito internacional del grupo (por ejemplo, en esos d�as abrieron el concierto de los Rolling Stones en la ciudad de M�xico y participaron en el festival WOMAD, organizado por Peter Gabriel) como las crecientes diferencias entre Hern�ndez y Marcovich que llevar�an a la disoluci�n del grupo (en un reportaje dado para MTV Latinoam�rica, en Bogot� Colombia, Sa�l le pregunta a Alejandro "�Qu� tenemos en com�n?" y �ste responde sarc�sticamente "�El n�mero de cromosomas?"). Caifanes ofreci� su �ltimo concierto el 18 de agosto de 1995 en la ciudad de San Luis Potos�.
Tras la desintegraci�n de Caifanes, Hern�ndez se dedica a recuperarse de un mal viral en sus cuerdas vocales, e invita a Alfonso Andr� (bater�a), a formar un taller musical llamado Jaguares, Alfonso, en ese momento se encontraba tocando en La Barranca con Federico Fong (bajo) y Jos� Manuel Aguilera (guitarra) y propone a Sa�l incorporarlos a la nueva banda.
Aunque en un principio la m�sica de Caifanes parec�a ser simplemente una versi�n en espa�ol de la m�sica de The Cure, la inclusi�n de La negra Tomasa en el repertorio del grupo no era casual: Hern�ndez y Romo tienen ra�ces en colonias populares de la ciudad de M�xico. Sin embargo, Caifanes no volvi� a apropiarse tan marcadamente de un estilo musical distinto del rock; por el contrario, incorpor� elementos de la m�sica popular mexicana en el esquema general de �ste.
Si bien en El diablito la mayor parte de las canciones puede ser calificada simplemente como rock, las letras comienzan a tomar elementos populares (como la integraci�n total del dicho De noche todos los gatos son pardos en la canci�n hom�nima) y con La c�lula que explota se marca en gran medida el estilo cl�sico de Caifanes: letras demandantes y po�ticas y m�sica a caballo entre el rock y la m�sica mexicana. La presencia de Alejandro Marcovich, a partir de este disco se vuelve fundamental en el sonido del grupo, a tal grado que para muchos fan�ticos la diferencia principal entre Caifanes y Jaguares consiste en el estilo del guitarrista.
La c�lula que explota construida como una balada rock con arreglos de mariachi, es la primera de una serie de amalgamas. En El silencio las fusiones tocan de nuevo la m�sica con una fuerte cadencia r�tmica que en M�xico se tilda de guapachosa (Nubes, Hasta morir, Para que no digas que no pienso en ti), pero tambi�n la banda (Piedra), e inluso aparece una versi�n de un son veracruzano, Mariquita, donde se combinan las tradicionales jaranas con las guitarras el�ctricas de Marcovich. Por �ltimo, en El nervio del volc�n experimentaron con r�tmicas ind�genas (Afuera), dieron un toque de bolero a las percusiones de Ayer me dijo un ave y construyeron La llorona sobre el vals tradicional del mismo nombre.